No hay ninguna duda de que el uso más extendido del aceite de oliva virgen extra es en crudo; por ejemplo, se usa mucho en ensaladas, aderezos y salsas. Y hay rumores de que este aceite no de-be usarse para cocinar platos calientes. Sin embargo, no hay nada más alejado de la realidad. Se puede cocinar con aceite de oliva virgen extra, y también se debe.

SE PUEDE COCINAR CON ACEITE DE OLIVA VIRGEN EXTRA

El motivo es muy sencillo: el aceite de oliva virgen extra es un aceite sumamente estable, gracias a la cantidad de grasas monoinsaturadas que lo compone. Por lo tanto, puede llegar a altas temperaturas sin que pierda sus componentes nutritivos. Además, no se vuelve tóxico, al contrario de otros aceites que se corrompen a temperaturas altas por su inestabilidad.

Es cierto que este es el aceite de oliva más costoso del mercado —precisamente por eso se tiene la creencia de que hay que consumirlo sólo en crudo—. Pero su precio es elevado por lo saludable que es tanto en bajas como en altas temperaturas.

En definitiva, se puede cocinar con aceite de oliva virgen extra. Por ejemplo, si vas a cocinar carne, mi recomendación es que utilices Carapelli Organic, ya que potenciará todo su sabor. Utiliza a diario los aceites de Carapelli y disfruta al máximo de una opción saludable, de gran calidad y con un sabor exquisito.

Disfruta de tus platos calientes favoritos con el aroma del aceite de oliva virgen extra.

Una de las dietas que está en su máximo esplendor hoy en día es conocida como la dieta cetogénica o la dieta keto. La primera vez que escuché hablar de ella, me generó mucho interés: va en contra de la mayoría de las dietas que existen, ya que su máxima es consumir productos “grasos” para bajar de peso.

¿Por qué es efectiva la dieta cetogénica?

Como seguramente sepas, la mayor parte de la energía del organismo es conseguida a través de los carbohidratos. Pero esta dieta propone una revolución metabólica: utilizar las grasas buenas como fuente principal de energía —proceso llamado ‘cetosis’—.

Para poder llegar a la cetosis, es importante disminuir la ingesta de carbohidratos al mínimo, para dejar que el cuerpo empiece a usar y quemar la energía de la grasa —corporal e ingerida—, que aporta mucha más energía que la adquirida por los carbohidratos.

Antes de continuar, debes saber que, si tienes pensado llevar a cabo esta dieta o alguna similar, te recomiendo que lo consultes primero con un experto nutricionista, que podrá aconsejarte sobre si es la idónea para ti o no.

¿En qué consiste?

El elemento principal de esta dieta son las grasas saludables como el aceite de oliva virgen extra y las aceitunas, gracias a sus propiedades nutricionales. Además, sacian el apetito, haciendo que el hambre disminuya a lo largo del día considerablemente.

A parte de las grasas, hay que consumir muchas verduras bajas en carbohidratos. En este sentido, los espárragos, las espinacas, el tomate, el brócoli, la coliflor, el pimiento, el calabacín, la lechuga, la col y las coles de Bruselas son muy recomendables en la dieta cetogénica.

En cuanto a la proteína, lo ideal es consumir productos altos en grasas saludables como el salmón, algunos mariscos, y carne. El queso y los huevos también son un buen alimento ya que tienen un bajo nivel de hidratos de carbono.

Y por supuesto, lo crucial es reducir casi al cien por cien el consumo de carbohidratos como el pan, la pasta, los cereales, las legumbres, los tubérculos, y el azúcar, así como cualquier alimento procesado. Debes tener en cuenta que el máximo de carbohidratos a consumir en la dieta cetogénica es de cincuenta gramos al día.

Sin duda, esta nueva forma alimenticia revoluciona el concepto de dieta habitual de reducir al máximo el consumo de grasa para bajar de peso. Pero no olvides que las grasas naturales, como el aceite de oliva, son saludables y necesarias para el cuerpo gracias a sus cualidades nutritivas. Así que no nos debería sorprender tanto llevar una vida sana teniéndolas a ellas como fuente energética principal.

Fuente: The Lancet

El aceite de oliva es uno de los principales ingredientes de la dieta mediterránea, lo que es la primera pista para conocer dónde se produce. Y ese territorio no es otro que la cuenca del Mar Mediterráneo. Pero, ¿sabes exactamente qué países son los principales productores del aceite de oliva virgen extra que consumes a diario? Te lo cuento.

A ORILLAS DEL MEDITERRÁNEO

La famosa dieta mediterránea tiene su razón de ser. Los países que más destacan por su gran calidad en el cultivo y recolecta del aceite de oliva son España, Italia, Grecia, Túnez y Portugal. De los países mencionados, debemos resaltar la importancia de España como productor, pues es el principal.

Gracias a la calidad de nuestros olivares y a la tradición aceitera, tenemos la maestría y el saber hacer, como en el caso de Carapelli. Sabemos disfrutar de sus aromas, sus matices y su sabor tan característico. Ahora, esta cultura, se abre camino cruzando cada vez más fronteras y llegando a cada vez más gente.

¿POR QUÉ TENEMOS EL MEJOR ACEITE DE OLIVA VIRGEN EXTRA?

Por un lado, por las condiciones climatológicas, que son idóneas para el cultivo del aceite. Por otro, las cualidades de la tierra. Ambas crean la combinación perfecta para conseguir el más puro zumo de aceitunas que puedas imaginar.

En Carapelli, a la hora de seleccionar las mejores aceitunas, nuestros master oliari recorren todos los olivares y almazaras en busca del mejor aceite. Por otro lado, nuestros master blender son los encargados de hacer la combinación de esos aceites. Esto es posible gracias a toda la sabiduría de la herencia de más de 125 años de buen hacer.

Teniendo a los principales productores de nuestro aceite de oliva virgen extra favorito tan cerca, solo nos queda disfrutar de todos sus matices en cada uno de nuestros platos.

Me parece fundamental saber qué es lo que estoy ingiriendo, sobre todo cuando se trata de productos envasados. La alimentación sana es lo más importante. Como a ti te interesa lo que consumes también, quiero contarte cuál es el valor nutricional del aceite de oliva.

¿TIENE MUCHAS CALORÍAS EL ACEITE DE OLIVA?

La ración de la que parto se basa en el mínimo de aceite de oliva que hay que ingerir en una jornada: 28 gramos o dos cucharadas soperas al día. Las calorías que guarda esta porción son sólo 180. Si agregas el aceite en una ensalada, por ejemplo, funciona muy bien para perder peso o cuidar la línea. El aceite de oliva ayuda a colmar el apetito y su ingesta calórica es bastante reducida.

MÁS INFORMACIÓN NUTRICIONAL DEL ACEITE DE OLIVA

Por otra parte, el valor nutricional del aceite de oliva en cuanto a los ácidos grasos es excelente: de 27 gramos de ácidos grasos, únicamente 4g son ácidos grasos saturados y 2g poliinsaturados; mientras que es muy rico en ácidos grasos monoinsaturados —20g aproximadamente—. Estas proporciones son el motivo por el cual el aceite de oliva es uno de los más estables a la hora de calentarlo.

La vitamina E cubre la posición estelar al hablar del contenido vitamínico del aceite. La porción en la que me baso contiene 1,3mg. Esta vitamina le da la cualidad antioxidante a este manjar. Además, de esto, contiene 0,28g de proteína, de Zinc y de Selenio; y 0,28g de las vitaminas B1, B2, y B6.

Es evidente que esta información nutricional del aceite de oliva lo saludable que es este delicioso ejemplar.

Fuente: NCBI

Cada género, a lo largo de los años, se adapta para estar en las óptimas condiciones que lo ayudan a sobrevivir. Gracias a esto, podemos disfrutar de una gran riqueza de olivos.

¿Existen más de 10 variedades de olivo?

Sí, y siempre me sorprende que un sólo árbol pueda adquirir una variedad tan amplia. Sin embargo, es perfectamente comprensible. Las variedades existen porque no todos los árboles sobreviven a los distintos tipos de climatología, terreno o enfermedades. Existen variedades de olivos, por ejemplo, que perduran en ambientes húmedos y que resisten a los hongos que aparecen por esa humedad; pero hay otras que no podrían sobrevivir en esas condiciones.

Como seguramente sepas, cada género, a lo largo de los años, se adapta para estar en las óptimas condiciones que lo ayudan a sobrevivir. Gracias a esto, podemos disfrutar de una riqueza de olivos descomunal: tan sólo en Italia existen 633 variedades diferentes, y en España hasta 410. Aún sabiendo racionalmente por qué, siempre me sorprenderá que exitstan tantas variedades de olivo.

Las variedades de olivo más destacadas y el sabor de sus aceitunas

Hoy me siento a contarte cuáles son las variedades más exquisitas que hay y que conforman los mejores aceites: el olivo Arbsequina, Coratina, Hojiblanca y Picual.

El olivo Arbequina da un fruto pequeño y de hueso grande, así que no desprende demasiada pulpa. Sin embargo, el sabor afrutado y dulce que posee, la convierte en una de las variedades más suave. Este tipo de aceituna suele utilizarse para mezclar con otras variedades de sabor más intenso, y así conseguir un sabor moderado entre ambas.

La variedad de olivo Coratina destaca por brindar un aceite de calidad suprema. Su sabor también es afrutado, pero, en comparación con la aceituna arbequina, es muy intenso. Además, tiene un alto contenido en polifenoles; es decir, ayuda especialmente a prevenir enfermedades degenerativas como la diabetes y el cáncer. Estarás de acuerdo conmigo en que, con estas características, es de las mejores variedades que puede haber.

Hojiblanca es otro de mis olivos favoritos. Este se encuentra sobre todo en España y se caracteriza por tener blanquecino el reverso de sus hojas. El sabor de sus aceitunas recuerda a la almendra amarga y la alcachofa; además tiene un ligero toque picante. El tipo de aceite extraído de esta variedad debe ser guardado en un recipiente oscuro por ser una variedad de fácil oxidación.

Por último, la variedad de olivo Picual presenta un fruto de sabor intenso que destaca por ser amargo y picante. A veces puede tener aroma de tomate, higuera, o hierba, algo que depende de la cosecha temprana o tardía. Estas aceitunas producen un aceite de oliva muy estable y resistente a la oxidación; algo que lo convierte en uno de los aceites más producidos en España.

Recientemente estaba en un almuerzo y salió el tema del aceite de oliva virgen extra. Todas las personas reunidas ahí sabían que el aceite de oliva era saludable, pero no todas sabían las razones. Eso me dejo pensativo, y decidí que sería buena idea escribir los motivos por los que el aceite de oliva virgen extra es uno de los alimentos más saludables que existen.

Disminuye el colesterol

Gracias a sus ácidos grasos, el aceite de oliva virgen extra fomenta la reducción del colesterol perjudicial (LDL). Esto significa que previene enfermedades cardiovasculares, optimiza la circulación de la sangre y, por tanto, nivela la presión arterial.

Evita enfermedades y retrasa el envejecimiento

El aceite de oliva virgen extra es sano también por contener antioxidantes que fortalecen el sistema inmunológico y, por lo tanto, te hacen menos propenso a padecer enfermedades. Además, los antioxidantes sirven para mantener las células del cuerpo en perfectas condiciones, cosa que retrasa la sensación del paso del tiempo en tu piel.

El aceite de oliva virgen extra ayuda a mantener un peso sano

Comer mal y en exceso son las razones principales del sobrepeso. Estamos viendo que el aceite de oliva es bastante nutritivo, y tiene el añadido de que sacia el apetito. Además, cambiar las frituras hechas con otro tipo de aceite por el aceite de oliva, ayuda a que no se absorba tanto el aceite, y por tanto no ingieras más cantidad de la necesaria.

Antiinflamatorio natural

El aceite de oliva virgen extra tiene una función antiinflamatoria gracias a su alto contenido oleocantal. De hecho, funciona especialmente bien con la inflamación de las articulaciones. En este sentido, ingerir aceite de oliva virgen extra es especialmente saludable para personas con artritis reumatoide o para prevenirla.

Anticancerígeno

El oleocantal también funciona para prevenir y combatir el cáncer. Este componente del aceite de oliva inhibe los procesos tumorales, ya que destruye una de las proteínas de las células cancerígenas y evita que estas células se repliquen.

Sé que ni tú ni yo necesitamos excusas para tomar aceite de oliva. Pero, ¿no es fantástico que además de tener un sabor exquisito, sea tan sano?

Fuente: NCBI

Adoro el sabor del aceite de oliva en todas sus vertientes: al natural, aromatizado o infusionado. Seguramente a ti te pase lo mismo. Tomar el aceite natural es paladear la tradición familiar, y un aceite aromatizado o infusionado cambia por completo la degustación de tus platos.

Tengo mis propias recetas de aceites infusionados y las he ido perfeccionando con los años. Mi familia adora cuando uso estas infusiones para cocinar. Me gustaría que sientas la satisfacción de descubrir y mejorar tus propias recetas de aceite infusionado, y, por eso, quiero compartir contigo la forma de infusionar el aceite de oliva para cuando quieras alcanzar un nivel Gourmet con tus platillos.

La mejor manera de infusionar el aceite de oliva

Cuando comencé a instruirme en el arte de añadir sabor al aceite de oliva, confundía lo que diferenciaba un aceite aromatizado de un aceite infusionado. Rápidamente aprendí la diferencia. Aromatizar el aceite de oliva significa añadir las especias al aceite en crudo y dejarlo macerar dos semanas como mínimo. Infusionar el aceite de oliva es algo muy diferente. Te cuento cómo realizarlo:

Añade una taza de aceite de oliva a una olla, y agrega los ingredientes con los que quieras infusionarlo. Por ejemplo, ajo, pimienta, tomillo, o guindillas. Caliéntalo a fuego bajo para que la alquimia se realice sin que se quemen los ingredientes añadidos ni el aceite. Lo fundamental es tener cerca un termómetro de cocina para medir la temperatura del aceite. Una vez que llegue a los 60º, retírala del fuego y déjala reposar una hora.

Una vez hecho esto, cuela el aceite y viértelo en un frasco de vidrio. Entonces podrás disfrutarlo con la comida que desees.

Posibles sabores del aceite

Para elegir con qué infusionar el aceite de oliva, es importante que sepas con qué quieres usar el aceite. No es lo mismo preparar un aceite especial para ensaladas, que un aceite para pizzas.

El aceite infusionado con ajo, pimienta y laurel es una buena forma de comenzar porque funciona con cualquier platillo: carne roja, blanca, pescado, pasta, y cualquier plato salado que desees realzar.

Si deseas cocinar una receta italiana, infusiona el aceite de oliva virgen extra con albahaca, ajo y sal para conseguir un aceite infusionado delicioso y acorde. Otra opción también es hacerlo con orégano, laurel, y sal.

Para las ensaladas lo más recomendable es usar la piel de un limón para infusionarlo.

Te recomiendo probar distintos ingredientes para hacer la infusión, hasta que encuentres la combinación perfecta para tus platos.

Así es, querido lector. El aceite de oliva no es sólo el aceite más delicioso que existe, también es uno de los más sanos, ya sea para tomar en crudo o cocinado. Yo, personalmente, cocino todos los días con este tipo de aceite para sentirme sano y en forma.

Sólo dos cucharadas soperas de aceite de oliva al día bastan para sentir el efecto de bienestar en el cuerpo. Por eso cocinar con aceite de oliva no solo es bueno, es la mejor opción.

Disfrutar de la cocina en verano

Seguramente te pase como a mí, que con la llegada del calor lo que más me apetece comer es comida ligera y fresca. Mi plato favorito del verano son las ensaladas, y el aceite de oliva es muy bueno para aliñarlas. Evidentemente, que las ensaladas sean la comida del verano no es ninguna novedad. En esta época del año gastamos menos energía que en invierno, y por tanto la ingesta calórica debe ser menor. Una ensalada con el aliño perfecto es óptima: refresca, aporta pocas calorías, y el aceite de oliva genera saciedad.

Te recomiendo mi elección personal para las ensaladas: el aceite de oliva virgen extra Il Nobile. Gracias a su agradable y equilibrado sabor, complementará de una forma sublime los sabores frescos del huerto.

No me cansaré de repetirlo: cocinar con aceite de oliva no es bueno, es perfecto.

Fuente: NCBI

Desde hace unos años se ha ido transmitiendo el conocimiento de que la dieta mediterránea es la mejor dieta que existe. Y, es verdad, todos sabemos eso, pero ¿sabes cuáles son los alimentos que la componen y por qué son tan saludables? Hoy te quiero mostrar la lista de los alimentos de la dieta mediterránea. Porque, más que una dieta, es una forma de vida en la que la salud pasa a un primer plano.

Aceite de oliva, un producto característico en la lista de alimentos de la dieta mediterránea

La cantidad ideal diaria de aceite de oliva son dos cucharadas grandes que puedes disfrutar en una deliciosa ensalada, verduras al vapor o con cualquier otro alimento. Este alimento protege contra enfermedades cardiovasculares, además de ser rico en vitamina E, carotenos, grasas que ayudan a regular el colesterol, y antioxidantes.

Legumbres

Los garbanzos, lentejas, alubias, soja, entre otros, son legumbres fundamentales para una alimentación sana. Son altas en proteína, tienen vitaminas, fibra y además son bajas en calorías. Cada legumbre tiene sus propias características; por ejemplo, las lentejas contienen mucho hierro, los garbanzos potasio, y las alubias ayudan a disminuir el colesterol nocivo.

Yogurt

Dos tazas de yogurt natural sin azúcar al día aumentan las defensas, enriquecen la flora intestinal, y ayudan a bajar de peso y a prevenir el cáncer, entre otras muchas cosas.

Cereales

La lista de alimentos de la dieta mediterránea se fundamenta en la pirámide alimenticia. Por eso, no pueden faltar los hidratos de carbono. Consumir hasta 80 gramos de arroz, pan, o pasta diariamente da la energía necesaria para el día a día.

Frutas y verduras frescas

Las frutas y verduras son esenciales. Puedes comer la cantidad que desees. En concreto, te recomiendo comer uvas de la región, ya que son ricas en antioxidantes que, además de retrasar el envejecimiento, previenen el cáncer, enfermedades cardiovasculares y degenerativas.

Ajo y Cebolla

El ajo es el antibiótico natural por excelencia. Una ingesta habitual de ajo fortalece tu sistema inmunológico. Además, mantiene la presión arterial equilibrada, previene enfermedades cardiovasculares y ayuda a disminuir el colesterol dañino. La cebolla contrarresta la glucosa en la sangre, así que es perfecta para personas prediabéticas y diabéticas.

Esta es la lista de alimentos de la dieta mediterránea que hay que consumir a diario. El pescado, el huevo, la carne blanca, roja, y las patatas son alimentos que forman parte de la dieta, y que hay que consumir una vez a la semana.

Fuente: NCBI