El aceite de oliva procede del fruto del olivo: la aceituna y, por eso, este forma parte del grupo de los aceites vegetales. Al provenir del reino vegetal, podrías pensar que todos los aceites pertenecientes a este grupo son igual de sanos. Sin embargo, esto no es así. Cada aceite vegetal aporta unas propiedades que lo convierten en más o menos saludable. Por eso, saber la diferencia entre el aceite de oliva y otros aceites vegetales es esencial para la salud.
¿QUÉ DETERMINA LA CALIDAD DE UN ACEITE?
Como bien sabes, los aceites se conforman por ácidos grasos, y su calidad, en gran medida, depende de la cantidad de ácidos grasos monoinsaturados, poliinsaturados o saturados que lo constituyan.
Los ácidos grasos monoisaturados son los más saludables para el sistema cardiovascular, y a estos le siguen los poliinsaturados, que también se consideran beneficiosos, pero en menor grado. Sin embargo, las grasas saturadas son nocivas para la salud, y es importante evitar alimentos que las contengan en grandes cantidades.
EL MEJOR DE LOS ACEITES VEGETALES
Una vez dicho esto, ahora sólo queda definir quién gana la contienda entre el aceite de oliva vs. otros aceites vegetales.
Tomaré como ejemplo el aceite de girasol, que es uno de los que más consumidos de forma regular. Este aceite abarca tan sólo un 16% de ácidos grasos monoinsaturados, y, a cambio, se conforma por un 72% de ácidos grasos poliinsaturados. Es un buen aceite, pero podría ser mejor. Podría ser como el aceite de oliva virgen extra, constituido por un 75% de ácidos grasos monoinsaturados y un 10% de poliinsaturados.
Seguiría comparando el aceite de oliva con otros aceites vegetales del mercado, pero te estaría robando tiempo, porque, en definitiva, el aceite de oliva es el que contiene más ácidos grasos monoinsaturados. Así que siempre que vayas a consumir un aceite vegetal, apuesta por tu salud. Apuesta por un aceite de oliva virgen extra de óptima calidad.
Fuente: Heart.org