La tradición de hundir el pan en aceite de oliva y después degustarlo viene de antaño. Estarás de acuerdo conmigo en que es prácticamente inevitable hacerlo con un buen pan y un excelente aceite de oliva virgen extra sobre la mesa. Esta es una tradición que permea todo el mediterráneo y, por eso, hoy quiero darte unas recetas deliciosas para mojar pan en aceite de oliva.

Dip de tomates secos

El sabor de los tomates secos me recuerda a Italia, por eso disfruto tanto preparando esta salsa. Necesitas:

• Queso crema: 300g

• Tomate seco:150g

• Aceite de oliva virgen extra Carapelli Il Nobile, al gusto

• 2 dientes de ajo

• 1 cucharada de romero

• Sal y pimienta al gusto

En un recipiente coloca los tomates secos y cúbrelos de aceite para que se hidraten. Añade el ajo picado, la sal y la pimienta y déjalo reposar dos horas. Cuando pase el tiempo, corta el tomate finamente y mézclalo con el queso crema.

Dip de yogurt y albahaca

Otro de las recetas para mojar pan en aceite de oliva considerado gourmet es el dip de yogurt con albahaca y nueces. Simplemente necesitas batir:

•1/2 taza de nueces picadas

•10 hojas de albahaca

•1 yogurt natural

•1 cucharada de aceite de oliva Carapelli Il Centenario

•Sal y pimienta al gusto

Marídalo con un poco de pan blanco, zanahoria, o pepino.

Dip de atún

Este dip de atún otorga un sabor original y exótico al paladar. Para hacerlo usa los siguientes ingredientes:

•2 frascos de atún de calidad

•2 cucharadas de jugo de limón

•1 ramillete de menta fresca

•1/2 cebolla pequeña

•1 cucharada de aceite Carapelli Oro Verde

•Sal y pimienta al gusto

Mezcla todos los ingredientes. No olvides retirar el agua del atún antes de añadirlo a la mezcla. Usa una batidora para untarlo con facilidad posteriormente.

Como bien sabes, adoro recibir gente en mi hogar, y me entretengo fácilmente en la cocina preparando todo tipo de recetas. Cuando mis amistades vienen, desean que la comida aún no esté hecha para degustar mis dips de aceite de oliva. Te aseguro que no dejan indiferente a nadie.

Aceitunas u olivas, el término usado para dicho alimento no posee tanta relevancia como las cualidades que alberga el fruto en sí mismo. Estos 4 beneficios de las aceitunas son cruciales para una vida sana, y por eso es altamente recomendable incluirlas en la dieta habitual.

En mi vida, uno de los grandes placeres consiste en tomar aceitunas como aperitivo mientras me dedico a cocinar. ¡Me encanta! Además de que existen distintas variedades que aportan intensidades, sabores y aromas diferentes que inspiran, es un alimento con cualidades altamente beneficiosas para la salud.

Aportan energía

Uno de los beneficios de las aceitunas es puramente energético. La composición de este alimento por ácidos grasos monoinsaturados es la responsable de que las aceitunas provean grandes cantidades de energía al organismo. Por si fuera poco, al ser lípidos saludables, fortifican el sistema cardiovascular y, por tanto, atenúan los niveles de colesterol (LDL)

Óptimas para la memoria

La estimulación del sistema cardiovascular, la activación de la circulación sanguínea y el efecto cardioprotector que fomentan los ácidos monoinsaturados, permiten la llegada del oxígeno a las células neuronales para facilitar una actividad óptima a nivel cerebral. Por ello, las personas que consumen aceitunas diariamente mejoran considerablemente su memoria y su sistema cognitivo.

Previenen el envejecimiento

Se le suma a los anteriores beneficios de las aceitunas la perpetuación de las células jóvenes, energéticas y activas. Este fruto alberga una gran cantidad de polifenoles y vitamina E; antioxidantes elementales para el buen funcionamiento del cuerpo y la mente. Así, las células no se ven dañadas por los radicales libres que las deterioran y envejecen. Las aceitunas ayudan a que el cuerpo funcione a la perfección todos los días.

Sacian el apetito

El ácido oleico de las aceitunas provoca un efecto de saciedad en el organismo. De este modo, consumir aceitunas disminuye la sensación de hambre y, por tanto, se ingiere un aporte calórico menor a lo largo del día. Esto es perfecto para personas que buscan mantener un peso ideal.

Existen más beneficios de las aceitunas a largo plazo, sin embargo, sé que el exceso de información a veces no es provechoso. Simplemente, atesora la idea de consumir siete aceitunas al día para mantener una salud magnífica.

La experiencia de catar aceite de oliva es altamente estimulante. Descubrir cómo un mismo alimento puede variar tanto en sabor, textura y color, es una auténtica maravilla. Si nunca has realizado una cata de aceite de oliva, ha llegado el momento.

1. El primer paso es elegir al menos dos aceites de oliva virgen extra de calidad que sean de diferentes variedades. De este modo, se contrastarán más fácilmente los tonos, aromas y sabores entre los distintos aceites.

2. Observa la tonalidad de color de cada uno de ellos. Para ello, vierte un poco de contenido en una copa de cristal y cubre la parte superior. Conseguirás que se concentre el aroma y la cata de aceite de oliva será altamente sensorial. ¿Son tonos verdes o dorados?

4. Paladea el sabor del aceite. Para la cata de aceite de oliva toma un poco de aceite y déjalo en la boca unos segundos. Coloca la punta de lengua en la zona interior de los dientes superiores y haz tres pequeñas inspiraciones. Es posible que el aceite tenga toques amargos y/o picantes.

3. Siente el aroma del aceite. Para asegurar que el aceite desprenda su aroma es ideal que esté a 28ºC. Durante 30 segundos, toma la copa entre ambas manos y realiza giros rotativos para que el aceite se caliente, se airee y desprenda su aroma. Acerca la copa a tu nariz y disfruta. Puede ser sutil, intenso e incluso tal vez percibas distintas notas aromáticas.

5. Valora su densidad. Es posible que el aceite cambie de densidad en distintos puntos de la cata. Observa también la sensación que deja en el paladar una vez que lo hayas ingerido.

Realizar una cata de aceite de oliva es comprender la variedad y la profundidad que hay en el mundo del aceite. Sin duda, uno de los placeres de la vida es degustar diversos productos gastronómicos de la mejor calidad. Puedes hacerlo con los aceites Carapelli.

Desde hace tiempo recibo múltiples preguntas sobre las aceitunas negras. Hay algunas que son respecto al olivo de aceitunas negras y otras sobre el grado de maduración que estas necesitan para ser consumidas. El sabor de este tipo de aceitunas es tan característico que no me sorprende que surjan tantas dudas.

¿Hay olivos específicos que den aceitunas negras?

Es cierto, existen dos tipos de aceitunas de mesa: verdes y negras. Esto da pie a que surjan muchas preguntas como: ¿Dónde se cultiva este tipo de olivos? ¿Cómo se diferencian de los olivos que dan aceitunas verdes? Sin embargo, antes de responder cualquier pregunta relacionada con este tema, hay que formular la siguiente: ¿existe un olivo de aceitunas negras?

Las aceitunas negras no surgen de una variedad de olivo que dé este tipo de aceitunas específicamente. En realidad, se trata de las mismas que las verdes. Su tonalidad es distinta puesto que estas han llegado a un punto máximo de maduración después de haberse tornado del verde al rojizo, y del rojizo al negro

¿Cuánto tardan en madurar las aceitunas negras?

Sabiendo que el olivo de aceitunas negras es el mismo que el de aceitunas verdes es presumible que surja la pregunta: ¿Cuánto tardan las aceitunas en llegar a su punto máximo de maduración? Desgraciadamente, no hay una respuesta precisa. La recolecta de aceitunas de verdeo suele ser entre septiembre y noviembre, pero los frutos de cada olivo maduran en diferentes tiempos. Son los master oliari quienes observan y seleccionan la calidad y el punto exacto de maduración de los frutos.

En pocas palabras, las aceitunas negras son las aceitunas más maduras. Disfruta las aceitunas A la Grecque de Carapelli, no sólo por su textura firme y espléndido sabor que desprenden en el paladar, también porque conoces parte de su historia.

Como seguramente sepas, existen varios métodos para extraer el aceite de oliva de las aceitunas. Sin duda, el aceite prensado en frío es el que consigue una mayor calidad en comparación con los aceites obtenidos a través de otros procedimientos.

La temperatura en el momento de la extracción

Soy de la creencia de que producir de forma lenta y calmada es la única manera para conseguir un producto de máximo nivel. Por contraparte, cuando los procesos se realizan de forma apresurada se pierde la calidad y el alma del producto final.

Hay algunos métodos que utilizan el calor para conseguir una producción de aceite más rápida y abundante. En esta necesidad de producir más cantidad con menos, se quiebra una norma fundamental: para conseguir un aceite de oliva de máxima calidad, el zumo de la aceituna debe extraerse a una temperatura menor a los 27ºC —una temperatura que el aceite prensado en frío sí respeta—.

Al calentar las aceitunas a una mayor temperatura, se pierden las propiedades organolépticas del fruto y sus nutrientes. Además, el aceite termina oxidándose antes de tiempo. De este modo, lo que podría haber sido oro líquido, se diluye y se transforma en una mera sombra de lo que pudo ser.

Carapelli: aceite prensado en frío

Por eso yo disfruto con los aceites Carapelli, porque respetan al máximo todo su proceso de producción para ofrecer aceites de una calidad superior. En el momento de la extracción no se quedan atrás ya que todos los aceites son prensados en frío.

Así es como Carapelli obtiene los mejores aceites del mercado:

• Primero las aceitunas son prensadas y trituradas en molinos para empezar a extraer el aceite de su fruto.

• La pasta obtenida de la prensa se agita para que el aceite se siga liberando, sin que la temperatura llegue a los 27ºC.

• Y, por último, se centrifuga el zumo obtenido para separar el aceite del agua y los residuos.

Vivimos muy deprisa y con la necesidad de conseguir resultados rápidos. Así, nos perdemos del disfrute. Por eso yo solo consumo el aceite prensado en frío, porque me recuerda que la calidad, la nutrición y el disfrute se encuentran en el camino y no en la meta.

El mejor aceite de oliva del mundo se produce con una materia prima de excelente calidad y un gran respeto por el producto durante todo el desarrollo de producción. La variedad de aceituna utilizada otorgará al aceite una degustación y una naturaleza específicas.

Variedades Carapelli

Los aceites Carapelli se elaboran con cuatro variedades distintas con unas características específicas que aportan a sus aceites los sabores más exclusivos.

• La aceituna Arbequina ofrece un aceite muy delicado y ligeramente dulce. Además, brinda unas notas verdes al paladar.

• La aceituna Coratina, por otro lado, crea un aceite más amargo, que ofrece aromas de hojas verdes y que deja una agradable sensación picante en la boca.

• El aceite Hojiblanca consigue varios matices al degustarlo; es ligeramente dulce al principio y deja un regusto a almendra verde en el paladar. Además, equilibra a la perfección el toque amargo y picante.

• Otra de las variedades de aceituna que crea el mejor aceite de oliva del mundo es la aceituna Picual, una de las variedades más aromáticas. Tiene un toque amargo y picante, pero un sabor que recuerda a la higuera.

Además de usar magníficas variedades, Carapelli cuenta con el trabajo de los master oliari. Quienes eligen las aceitunas que están en perfectas condiciones y en el punto de madurez ideal para producir el aceite.

Gracias a todo lo anterior, los aceites Carapelli han sido galardonados en los más prestigiosos concursos de Calidad de Aceite de Oliva Virgen Extra. Destacando en los primeros puestos con el aceite Carapelli 125 Years Celebration, y Carapelli Founders Edition.

Para crear el mejor aceite de oliva del mundo se necesita la mejor materia prima y un procesamiento altamente cuidado y controlado. Es así como se hacen los aceites Carapelli, aceites que habitarán en la memoria de tu paladar para siempre.

Algunas personas me preguntan si se puede usar aceite de oliva para freír, y yo siempre respondo lo mismo: mientras sea virgen extra, no sólo se puede, se debe usar para freír. Estos son 3 frituras que mejoran indudablemente cuando se usa un aceite de oliva de calidad premium.

Tempura de verduras

La tempura de verduras es muy sencilla de hacer. Sólo necesitas cortar en trozos las verduras que quieras preparar. Pueden ser zanahorias, calabacín, espárragos, brócoli, pimiento e incluso espinacas. Una vez tengas los trozos, colócalos en una mezcla de agua fría, harina, huevo y sal. Para este tipo de recetas, puedes usar aceite de oliva para freír a una temperatura entre 130º y 145ºC. Sumérgelos en el aceite, y cuando pasen tres minutos, estarán listos.

Pollo frito

Para elaborar esta receta solo debes colocar piezas de pollo en un bol y bañarlas en zumo de limón, un par de dientes de ajo machacados, sal y pimienta al gusto. Déjalas marinar durante dos horas y, después, usa una harina especial para rebozar todas las piezas. Fríe las piezas en AOVE a una temperatura de 160ºC durante doce minutos para que se cocinen por dentro y estén crujientes por fuera.

Croquetas

Claramente, las croquetas también se pueden freír con aceite de oliva virgen extra. En cuanto a la receta de las croquetas, cada persona tiene su receta secreta y su relleno favorito. Hazlas como sueles hacerlas, pero te recomiendo que, al freírlas, te asegures que la temperatura del aceite esté a 160ºC para que queden crujientes.

Se puede usar aceite de oliva para freír porque conserva todas sus propiedades y su sabor, siempre y cuando no sobrepase los 200ºC. Así que, con la ayuda de un termómetro de cocina, disfruta de las frituras más deliciosas con Carapelli. Tus recetas cambiarán para siempre.

Hay muchos tipos de vinagreta, pero para conseguir la vinagreta tradicional perfecta es necesario tener a mano aceite de oliva y vinagre de excelente calidad y que, además, complementen sus sabores a la perfección. A partir de este punto, sólo es cuestión de añadir las medidas adecuadas.

Ingredientes de la vinagreta perfecta con aceite de oliva y vinagre.

Para esta receta, que me ayuda a convertir todas las ensaladas en platos Gourmet, utilizo siempre el Aceite de Oliva Oro Verde Carapelli, y el Vinagre Balsámico de Módena IGP Envejecido Carapelli. Estos dos productos fusionan sus sabores y forman una vinagreta equilibrada y armónica tanto por su aroma como por su sabor.

Para completar la vinagreta, además del aceite de oliva y vinagre, suelo añadir hierbas aromáticas del tiempo, sal, pimienta y, a veces, un poco de mostaza.

La proporción ideal de aceite de oliva y vinagre

Emplear los ingredientes más altos en calidad sin unas proporciones adecuadas no tiene sentido gastronómicamente. Una vinagreta necesita tres de aceite por cada cucharada de vinagre. Yo suelo usar dos cucharadas de vinagre balsámico de módena con seis de aceite de oliva virgen extra.

Cómo hacer la vinagreta perfecta paso a paso.

• Mezcla el vinagre con 1/4 de cucharadita de sal enérgicamente.

• Si quieres que la vinagreta tenga un poco de sabor a mostaza, añade una cucharadita a la mezcla y vuelve a batir hasta que se disuelva por completo. En caso de que no lo desees, puedes saltarte este paso.

• Agrega el aceite de oliva muy poco a poco, sin dejar de mezclar. Esta es la única forma en la que el aceite de oliva y el vinagre podrán emulsionarse.

• Añade una pizca de pimienta recién molida, y también las hierbas aromáticas del tiempo que desees.

• Finalmente, vuelve a mezclarlo todo.

Al ser una vinagreta tradicional y de un sabor excepcional, marida bien con todo tipo de ensalada; sin importar si es únicamente de verduras, si tiene fruta, carne o pescado. Utilizar esta pareja de aceite de oliva y vinagre, hará que tus ensaladas jamás vuelvan a ser las mismas.